El 12 de Abril de 1961, desde el Cosmódromo de Baikonur, fue lanzado el Vostok I, primer cohete espacial del programa ruso Vostok de naves tripuladas; Yuri Gagarin se convirtió en el primer hombre en pasearse por el espacio; la nave solo dio una vuelta alrededor de la tierra, a 315 kilómetros de altura, con material electrónico, radio y televisión para monitorizar las condiciones del astronauta.
Desde entonces para acá, aparte de haber llovido mucho, y de que los americanos desbancaran a los rusos del primer puesto en la carrera espacial con la llegada del hombre a la luna en 1969, hemos llenado el espacio de chatarra con todo tipo de satélites, cohetes, naves y telescopios. Hasta hemos tenido una serie de televisión donde un particular se dedicaba con una nave espacial de fabricación casera a recoger hierrajos abandonados en el espacio.
Como en toda hazaña que se precie tenía que haber una frase célebre, pero Gagarin dijo dos: “LA TIERRA ES AZUL” y “AQUÍ NO VEO NINGUN DIOS”.
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