Nos hemos enterado de que el bar del Congreso está subvencionado con casi un millón de euros al año, bebidas alcohólicas incluidas, para que a Sus Señorías la comida le salga baratita y la copita también (por si ya tenían pocos privilegios); cuando nos enteramos de esto, cuando nos enteramos y no antes, entonces se deciden a quitar la subvención al alcohol, pero lo demás no. Y lo justifican porque tiene un horario especial;
hombre, horario especial el de mi primo político (que no es que sea político -que más quisiera él-; es que es el marido de mi prima). Se levanta a las seis de la mañana para abrir su bar y termina a la una o las dos de la noche, librando un solo día a la semana, paga impuestos de todo tipo, un seguro autónomo desorbitado, gana solo para ir comiendo... ¿Me habla usted de horario especial? Pues como mi primo los hay a montones, y no tienen ninguna subvención, sino todo lo contrario. ¿Y que ocurrirá en los otros diecisiete "Congresos" que tenemos? Mejor no pregunte,oiga.
Nos hemos enterado de que todos los partidos políticos se pusieron de acuerdo para subir el sueldo al presidente de un parlamento autonómico y los portavoces (que bien y que pronto se ponen de acuerdo para eso y para cosas que afectan a los ciudadanos nunca están de acuerdo); unos políticos que, como decía alguien, unos con motosierra y otros con tijeras, se dedican a hacer recorte tras recorte, se suben el sueldo a "pico callado". Luego, cuando se descubre el pastel, dan marcha atrás y rectifican. Pero solo porque resulta que nos hemos enterado, que si no nos enteramos, la cosa se queda ahí. Todos los políticos que votaron eso deberían dimitir y si no lo hacen los jefes de sus grupos políticos deberían cesarles inmediatamente. Pero no, aquí, se rectifica, se justifica y se pospone la subida, que luego, ya si eso, ya iremos viendo.
Nos hemos enterado de que las pensiones van a bajar; otro recorte más de los que no nos habían prometido, de los que no estaban previsto, vamos, pero como la imprevisión es imprevisible... pues eso. "Se reunieron catorce señores (otra vez), bueno, esta vez doce; y mire usté que gracia con lo que me salen... Total, que las pensiones ya no se revalorizarán con el IPC, que ya era malo, porque si los precios suben un treinta el IPC solo un tres, sino que ahora se valorará la esperanza de vida, o la situación económica o vaya usted a saber qué, porque hablan de la sostenibilidad y otras historias. Vamos aprendiendo palabras nuevas a golpe de recortes.
Nos hemos enterado de que un presidente autonómico, presuntamente, se quería gastar veinte mil euros en un entrenador personal (de dinero público); como nos hemos enterado, pues ha dado marcha atrás. Hombre, y todavía hay quien lo defiende, porque un cargo tal tiene que estar bien entrenado. Señores, un cargo tal debe prepararse por su cuenta para el cargo, porque si ha optado a él, debe de estar preparado para ejercer la función, y si no a la calle. Pero no, yo... al cargo; luego ya que me prepare un entrenador personal y lo de siempre: luego, ya si eso, ya iremos viendo.
Nos hemos enterado del sueldo que cobran los directivos (presidente, director, consejeros), del denominado "Banco Malo", que según lo poco que yo he profundizado en el asunto (y no quiero profundizar más, para no cabrearme más) es una especie de entidad financiera que pagamos de nuestro bolsillo para que los otros bancos (osea, los que no son malos), a los que también hemos ayudado, les endosen el montón de viviendas que tienen sin vender, al Estado (nosotros), las compremos y las vendamos si podemos, que según los últimos informes no podremos. Es decir, limpiamos los bancos ¿buenos? con un banco malo y las viviendas, si no las vendemos, bueno, pues luego, ya si eso, ya iremos viendo. Si estoy equivocado que alguien me corrija.
Nos hemos enterado de que alguien propone barajar la posibilidad de eliminar el Salario Mínimo Interprofesional para que se pueda trabajar por menos de seiscientos euros al mes; yo no se cuanto gana el que dice, o los que dicen eso, pero me apuesto un céntimo a que ganan más de diez mil euros al mes. Con lo cual hay que tener la cara muy dura para decir eso; oiga bajese usted, y todos los que están en su línea, el sueldo a quinientos euros al mes y entonces estaremos de acuerdo con usted. Básicamente porque en ese momento se habrá acabado la crisis.
Y ya, por último, nos hemos enterado de que trabajar en un país de la Unión Europea no es trabajar en el extranjero; esto lo ha dicho presuntamente alguien que presuntamente dijo que iban a crear tres con cinco millones de empleos cuando presuntamente llegaran al gobierno (aunque yo creo que, presuntamente, nos enteramos mal y lo que diría sería que, presuntamente, iban a "comprar tres o cinco sillones que no sean feos", supongo que para las ruedas de prensa donde, presuntamente, decir, cosas como estas). Vámonos para Alemania, que de los Pirineos para arriba ya no es el extranjero.
Así está el panorama... y esto es de lo que nos hemos enterado. ¿Que hay de lo que no nos hemos enterado? ¿Que nos quedará por "escuchar"?
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